Nos han despertado los niños a las 7,35 a.m. Como es pronto y lo tenía en el entrenamiento me voy a correr por la urbanización y alrededores para calentar y ver sensaciones. No creo, a priori, que vaya a llover mañana domingo, está todo despejado y hace un tiempo bastante bueno.
Nos bajamos a Sevilla, al Estadio Olímpico, a recoger el dorsal. No está mal organizado y aún no hay mucha gente. Soy el dorsal 1287. Puedo ver el interior del Estadio donde mañana saldré y espero llegar.
Nos bajamos a Sevilla y empezamos con la pre-maratón, los niños a cuestas, en hombros, corriendo detrás suyo, intentando comer y que no rompan nada o se caigan..... se supone que el día antes de la carrera debe ser un día tranquilo, de descanso absoluto, si eso un ligero paseo. Nosotros nos tiramos todo el día en la calle con los niños pateándonos Sevilla, que encima con el buen tiempo que hay está todo el mundo en la calle.
Llegamos a las 20,30 h. a la casa de los tios (casi 12 horas desde que salimos) y nada más entrar Sara se resbala y golpea con la boca en un sofá. empieza a sangrar por los dientes y resulta que se ha arrancado un trozo del labio por la parte de dentro......
Nos la tenemos que llevar a un centro de salud para ver si le tienen que dar algún punto. Al llegar y ver la gente que hay en la sala de espera lo primero que pienso es que seguramente no vaya a correr la carrera, entre lo cansado que estoy y las horas que vamos a estar aquí creo que no sería recomendable. Por suerte nos atienden al momento y nos dicen que es mejor no darle puntos con lo que volvemos tranquilos y contentos a casa, a ver si podemos cenar y acostarnos.
Pese al café irlandés que me tomé por la tarde en el flagerthy´s no me cuesta dormir y sobre las 24 h. caigo muerto...Mañana será el gran día y ya he dejado todo preparado, la ropa, la música, el desayuno, la vaselina, la glucosa.....
Nos bajamos a Sevilla, al Estadio Olímpico, a recoger el dorsal. No está mal organizado y aún no hay mucha gente. Soy el dorsal 1287. Puedo ver el interior del Estadio donde mañana saldré y espero llegar.
Nos bajamos a Sevilla y empezamos con la pre-maratón, los niños a cuestas, en hombros, corriendo detrás suyo, intentando comer y que no rompan nada o se caigan..... se supone que el día antes de la carrera debe ser un día tranquilo, de descanso absoluto, si eso un ligero paseo. Nosotros nos tiramos todo el día en la calle con los niños pateándonos Sevilla, que encima con el buen tiempo que hay está todo el mundo en la calle.
Llegamos a las 20,30 h. a la casa de los tios (casi 12 horas desde que salimos) y nada más entrar Sara se resbala y golpea con la boca en un sofá. empieza a sangrar por los dientes y resulta que se ha arrancado un trozo del labio por la parte de dentro......
Nos la tenemos que llevar a un centro de salud para ver si le tienen que dar algún punto. Al llegar y ver la gente que hay en la sala de espera lo primero que pienso es que seguramente no vaya a correr la carrera, entre lo cansado que estoy y las horas que vamos a estar aquí creo que no sería recomendable. Por suerte nos atienden al momento y nos dicen que es mejor no darle puntos con lo que volvemos tranquilos y contentos a casa, a ver si podemos cenar y acostarnos.
Pese al café irlandés que me tomé por la tarde en el flagerthy´s no me cuesta dormir y sobre las 24 h. caigo muerto...Mañana será el gran día y ya he dejado todo preparado, la ropa, la música, el desayuno, la vaselina, la glucosa.....
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